Amir Demarion Harden de 8 años, de Burnsville, Minnesota.
Un niño en Burnsville, Minnesota fue asesinado a tiros mientras protegía a su madre de su padre abusivo.
Amir Demarion Harden de 8 años, murió el 9 de junio por complicaciones sufridas después de recibir un disparo en la cabeza y el cuello el 6 de junio, según un comunicado de prensa emitido por el médico forense del condado de Hennepin.
Danair Cornelius Harden de 30 años, de Burnsville, Minnesota.
El día del tiroteo, el padre del niño, Danair Cornelius Harden de 30 años, salió de la cárcel tras pagar la fianza por cargos de violencia doméstica.
Harden regresó enojado al apartamento de la familia en 13800 de Echo Park Court en Burnsville, una ciudad a unas 15 millas al sur de Minneapolis.
“Su padre intentó dispararme y matarme, pero en lugar de eso le dispararon a mi hijo”, escribió Cherish Edwards, la madre de Amir, en un GoFundMe para recaudar fondos destinados a la mudanza y otros gastos. “Amir intentó arrebatarle el arma de la mano a su padre. Le grité que se fuera y fuera con los vecinos. Él se negó y dijo ‘mami, no te dejaré aquí‘”. «Su padre se pegó un tiro en la cabeza después de dispararle accidentalmente a Amir. Sus 4 hermanos presenciaron este trágico suceso. Mis hijos están traumatizados y probablemente necesitarán terapia por el resto de sus vidas«.
«Mis hijos están traumatizados y probablemente necesitarán terapia por el resto de sus vidas«, añadió Edwards en la recaudación de fondos en línea.
El padre como el hijo fueron trasladados de urgencia al Centro Médico del Condado de Hennepin con heridas de bala.
Danair Harden quien se autoinfligió un disparo en la cabeza durante el incidente, permanece hospitalizado en estado crítico, según la policía.
El día en cuestión, el acusado enfrentaba acusaciones en el Tribunal de Distrito del Condado de Dakota de que, el 30 de mayo, estranguló a Edwards cuando ella expresó su deseo de poner fin a su relación de 10 años.
Edwards también alega que Harden intentó impedir que ella pidiera ayuda y huyó después de que llamaron a la policía. Cuando llegaron los agentes, ella les informó que Harden probablemente tenía un arma en su poder y un permiso para portarla. Al final, fue acusado de delitos menores de interferir con una llamada de emergencia, agresión doméstica y alteración del orden público.
“[Ella] informó que ha habido otras disputas domésticas entre ella y el acusado varias veces hace muchos años”, escribió la policía en un documento de acusación obtenido por el periódico, señalando que Edwards estaba muy preocupado de que Harden volviera a perseguirla.
Durante su audiencia de fianza, los fiscales pidieron que se emitiera una orden de prohibición de contacto contra Edwards y su apartamento, que Harden entregara sus armas de fuego y que se fijara una fianza de 10.000 dólares. En cambio, la jueza del Tribunal del Primer Distrito Judicial, Dannia Edwards, fijó una fianza de 4.000 dólares.
Harden estaba libre a las 4:50 de ese día; Aproximadamente siete horas después, Amir recibió un disparo.
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